“Estén prevenidos”
Jesús habló diciendo: “Estén prevenidos, porque ustedes no saben qué día vendrá su Señor. Entiéndanlo bien: si el dueño de casa supiera a qué hora de la noche va a llegar el ladrón, velaría y no dejaría perforar las paredes de su casa.
Entonces la finalidad que persigue este relato, no es asustarnos, al contrario, él quiere animarnos, Jesús habló diciendo: “Estén prevenidos”, estas son palabra claves, el Señor vendrá, eso es seguro. Pero no sabemos cuando, de ahí la imagen del ladrón, que da al relato algo muy vivo a los imprevistos. San Pablo también utilizó:. Vosotros mismos sabéis perfectamente que el Día del Señor ha de venir como un ladrón en la noche. (1 Tesalonicenses 5,2).
Estamos de prevenidos, es decir estamos avisados, el Señor nos lo ha dicho, ahora como nos encuentre, dependerá de nosotros.
¿Cuál es, entonces, el servidor fiel?,
Ustedes también estén preparados, porque el Hijo del hombre vendrá a la hora menos pensada. ¿Cuál es, entonces, el servidor fiel y previsor, a quien el Señor ha puesto al frente de su personal, para distribuir el alimento en el momento oportuno?
¿Cuál es, entonces, el servidor fiel?, En el mundo de hoy, nos aquejan un sin fin de problemas personales, sociales y económicos y de justicias mal llevadas. Es cierto por ejemplo, que las relaciones familiares no siempre se viven en armonía; que los modelos económicos no han hecho otra cosa sino radicalizar la brecha entre pobres y ricos, es cierto que vemos miseria, explotación, mentira, corrupción, desigualdades humillantes, avaricia y distinciones, en otras palabras, una situación indigna de nuestra realidad. ¿Entonces cual es la actitud del servidor fiel?. Como buenos cristianos, es decir como fieles servidores, tenemos que hacer todo lo posible para transformar esta realidad apoyado en el testimonio de Jesús, es decir, transformar la realidad desde la solidaridad, porque estar preparados, también es no ser inconciente al sufrimiento de la humanidad, es por tanto nuestro compromiso de bautizados, no solo anunciar, sino que también denunciar a los que le dan a los hombres una vida indigna.
Al mimo tiempo, ser servidor fiel, es vivir en oración y contemplación del paso de Dios en nuestras vidas y de la comunidad, pero tal como fue el ejemplo de Jesús, en actitud de servir y no ser servidos.
Feliz aquel servidor a quien su señor, al llegar, encuentre ocupado en este trabajo.
Es así como Jesús nos afirma Feliz aquel servidor a quien su señor, al llegar, lo encuentre ocupado en este trabajo, un servidor fiel y previsor. Fidelidad a la voluntad de Dios, a los bienes espirituales que nos han entregado, que estos sean administrados con rectitud en bien propio y de los demás, previsor estando en paz en nuestras relaciones con Dios, fieles a la gracia recibidas, a nuestro compromiso bautismal.
Velar y vigilar acompañados de la oración constante, porque la gracia de Dios, se nos concede por la oración, es por esto que Jesús nos exhorta a que oremos sin interrupción.
Velar y vigilar sobre aquello que nos aparta de Dios, aquello que entorpezca nuestros pensamientos y nuestro corazón, atentos a nuestra forma de vida, procurar que no nos dominen las cosas materiales, las obligaciones de orden temporal, por mucho que haya que cumplirlas, pero no permitir que nuestro corazón se aprisionen en ellas, ni el entusiasmo para dedicarse a las cosas de espíritu.
Bendice al Señor, alma mía, del fondo de mi ser, su santo nombre, bendice al Señor, alma mía, no olvides sus muchos beneficios…….
Clemente y compasivo es el Señor, tardo a la cólera y lleno de amor; no se querella eternamente ni para siempre guarda su rencor…
Como se alzan los cielos por encima de la tierra, así de grande es su amor para quienes le temen……
Mas el amor del Señor desde siempre hasta siempre para los que le temen, y su justicia para los hijos de sus hijos, para aquellos que guardan su alianza, y se acuerdan de cumplir sus mandatos. (Salmos (SBJ) 103)
De Corazón
Pedro Sergio
jueves, 27 de agosto de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario